Iniciación a la Geomancia: Cómo Realizar Lecturas Adivinatorias con Éxito
En esta serie de artículos aprenderás cómo iniciar una consulta al oráculo de la tierra, qué instrumentos usar para generar los signos, de dónde partir para una correcta interpretación y cómo terminar una lectura geomántica. Antes de empezar quiero recordarte que acá nos dedicamos a la geomancia astrológica. Existen en todo el mundo diversos sistemas adivinatorios en los que se emplean las 16 figuras geométricas. Estos comparten cierta familiaridad pero confundirlos o mezclarlos sería un error. Aprende acá cómo se consulta la geomancia
La geomancia astrológica se distingue de todos los demás sistemas porque gran parte de sus cimientos filosóficos, místicos y adivinatorios reposan sobre el saber astrológico cultivado en occidente durante la Edad Media.
Entonces, aunque es cierto que muchas de las pautas que acá te compartiré pueden ser tomadas en cuenta para el ejercicio de otras prácticas adivinatorias, el objetivo de esta serie de artículos es que adquieras el saber necesario para iniciar, desarrollar y concluir una consulta de geomancia astrológica de la mejor manera posible. Con todo esto claro, comenzamos…
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¿Cómo se inicia una consulta geomántica? Sobre la perfección de la pregunta y otros asuntos preparatorios.
Quien acude al oráculo lo hace buscando información y guía. Es así como todas las consultas comienzan con la necesidad de conocer, comprobar, descartar o reafirmar algo. Pero tener cosas que preguntar no basta para dar inicio a una consulta.
El instante en el que se manifiesta lo que se quiere saber debe distinguirse del momento en el que se comienza a consultar el oráculo. Son etapas distintas y distantes. Presentaré estas en forma de pasos buscando así explicar mejor el asunto para que aprendas a moverte sabiamente de un punto al otro.
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Paso 1. Perfeccionar la pregunta.
Más adelante serás tú quien se encargue de interpretar el oráculo, pero ahora tu misión es otra.
En este primer momento tu tarea consiste en asegurarte de que no se apelará al oráculo con una pregunta ambigua o inexacta. Una vez comprobado lo anterior debes tomarte el tiempo para considerar, en base a tus conocimientos, qué tanto puedes aportar tú como intérprete del oráculo.
Bajo esta perspectiva, podemos decir que el primer paso para consultar al oráculo se subdivide en dos partes.
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1.1 Analizar la pregunta para la consulta con Geomancia.
Comienza poniendo por escrito tu necesidad. Escribe aquello que quieres saber, comprobar, reafirmar o descartar. Si la consulta es para alguien más, toma nota de la razón por la cual esta persona acude a las puertas del oráculo. Luego considera si la pregunta es ambigua o inexacta.
Por ambiguo me refiero a poco o nada claro. Si la pregunta no se entiende, con toda seguridad tampoco se entenderá la respuesta. Si se hace una pregunta así, no te extrañe que el oráculo arroje una respuesta errónea, que no puedas interpretar o que no tenga nada de acertada.
Lo primero que debes considerar es que una pregunta es solo una pregunta. No hagas dos, ni tres preguntas juntas. Haz solo una.
Está bien que un individuo tenga dudas sobre si le conviene comenzar una relación con alguien e irse a vivir con esa persona. Eso no tiene nada de malo. En relación a un asunto (la vida sentimental en este caso) pueden surgir múltiples preguntas. El error está en abordar al oráculo con todo eso al mismo tiempo.
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Lo correcto sería aislar las preguntas y abordarlas una por una. Así:
- ¿Me conviene establecer una relación con X?
- ¿Me conviene irme a vivir con X?
Que te convenga tener un noviazgo con alguien no quiere decir que la convivencia de ambos bajo el mismo techo será igualmente afortunada. Asegúrate de no estar agrupando dos o más preguntas en una.
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Lo segundo sería considerar si existe una mejor forma de plantear la pregunta.
Para esto se debe conocer con exactitud qué es lo que el consultante quiere saber y qué es lo que el oráculo y su intérprete (tú o yo) podrá aportar en dicho caso. Volviendo a la pregunta anterior: Digamos que lo que se quiere saber es si conviene o no tener una relación con X. ¿Planteamos así la pregunta o la refinamos? Una relación conveniente no es lo mismo para todas las personas. Debes tener claro qué sería lo conveniente para ti o para la persona que hace la pregunta.
Al preguntar si la relación será conveniente, el oráculo con uno de sus jueces te dará un sí o un no. Pero si no tienes claro cuál es la conveniencia que persigue la persona que pregunta, te costará ampliar la respuesta del oráculo apoyándote en ese juez, sus testigos y las figuras que ocupan las casas astrológicas.
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La consulta de Geomancia te puede decir más de lo que piensas
Es cierto que no puedes abordar al oráculo con varias preguntas al mismo tiempo, pero también es verdad que todas la aristas de una misma pregunta aparecerán reflejadas en el oráculo que se levante para responder a la duda. Por ejemplo, si la conveniencia que se persigue es la consolidación del vínculo. Que la relación no sea algo pasajero. Entonces luego que el oráculo diga sí o no, las demás figuras relacionadas al tema te ayudarán a entregar un sólido y claro por qué que satisfaga la necesidad que dio origen a la consulta. Si en el fondo la persona lo que se quiere saber es si se podrá tener una relación duradera con X, entonces podemos considerar si cambiamos la pregunta inicial por una de estas:
- ¿X me será fiel?
- ¿Una relación con X será hasta que la muerte los separe?
- ¿Cómo sería una relación entre el consultante y X?
- ¿Una relación con X cubrirá las expectativas del consultante?
Entonces sería bueno que te tomes el tiempo para considerar cuál sería la mejor. Cuando se haya dado con la pregunta que mejor se adapta a lo que se quiere saber, entonces podrás seguir avanzando.
1.2 Considerar tus capacidades para una Consulta de Geomancia
Lo siguiente es tener en cuenta qué tanto puedes hacer tú como intérprete del oráculo. Y en el caso de que la lectura sea para alguien más, comunicarle a esta persona lo que tú puedes hacer en base a tus conocimientos. Una vez que esto quede claro asegúrate de que será suficiente. Si apenas estás comenzando posiblemente solo puedas dar un sí o un no según el juez que responda a la pregunta. Si tienes un poco más de conocimiento podrás manejar los testigos para dar más cuerpo a la respuesta.
Por otra parte, si dominas la dinámica de las figuras que ocupan las 12 casas previas a los testigos, su relación con el asunto en cuestión y sus correspondencias astrológicas, serás capaz de dar una respuesta más que satisfactoria.
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¡Es una cuestión de dominio!
Cuando domines los aspectos sapienciales y místicos que acompañan la geomancia astrológica, entonces podrás ser capaz de proponer y gestionar tratamiento para lo que se pueda y sea favorable cambiar. Debes tener claro qué tanto eres capaz de dar como intérprete del oráculo. Todos los intérpretes no son magos o sabios geománticos. Pero creo que todos debemos buscar cultivar las tres cualidades. Adivinación, magia, y sabiduría.
Si sólo puedes responder preguntas, limítate a eso. Si no puedes ofrecer más, y estás consultando para otro individuo asegúrate que este tenga claro que de ti no recibirás soluciones u orientaciones mágicas, médicas, fisiológicas, espirituales, etc.
Cuando hayas comprobado que tu pregunta es coherente en relación al oráculo, es fiel a la necesidad más profunda del consultante y se tiene claridad respecto a lo que tú puedes aportar, entonces habrá llegado el momento de dar el siguiente paso.
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Excepción a la regla:
Si vas a hacer un horóscopo completo entonces no hay pregunta que perfeccionar. Solo necesitarás tener claridad del tiempo que cubre dicha consulta.
Un horóscopo puede ser natal, anual, estacional, mensual o incluso diario. Aquí no hay una pregunta que perfeccionar. Todo el cuadro geomántico (juez, testigos y casas astrológicas) deben ser interpretados a la luz del tipo de horóscopo que se ha levantado.
Sin embargo, al hacer este tipo de oráculos si no eres mago o sabio geomántico igualmente deberás limitarte a comunicar aquello que reflejan las figuras presentes en la lectura. Intentar intervenir en la situación sin el conocimiento y las técnicas adecuadas podría ser estéril, frustrante o incluso perjudicial.
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¿Cómo se consulta la geomancia? Este es solo el primer paso. Perfeccionar la pregunta.
Perfeccionar la pregunta es primordial porque es lo que te pondrá en el camino correcto para hacer las cosas de la mejor manera posible. Piensa y ayuda a pensar a los demás. Identifica una pregunta, sométela a un proceso de perfección y luego considera qué tanto puedes hacer en relación a la pregunta.
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Estando solo o con alguien más a la puerta del oráculo.
No te apresures, medita sobre la pregunta. No te sobre exijas, evita hacer más de lo que puedes.
Calma tu mente, relaja tu cuerpo, reúne tus herramientas y entonces estarás listo.
Que la sabiduría de la tierra acompañe y traiga luz a tu persona y tus consultantes. Confío en que he logrado poner un poco de luz sobre tu conocimiento de este arte. Y espero seguirlo haciendo en futuros artículos. Deja tu comentario y síguete sumergiendo en esta Mágica Experiencia. Que la sabiduría del cielo te acompañe, donde quiera que estés.
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